El maestro establece el estado de ánimo para que los estudiantes se sientan bien prestándoles toda su atención. Deben ser agradables, sonreír mucho, amables y amigable para establecer una buena relación. Los estudiantes se sentirán cómodos con el maestro.
La estructura objetivo se transmite a través de acciones. Los estudiantes observan las acciones y los estudiantes las realizan ellos mismos. El maestro usa el movimiento físico de la cabeza y el cuerpo para explicar oraciones, estructuras gramaticales y palabras de vocabulario.
Para presentar temas de discusión, reforzar las lecciones, proporcionar una ayuda visual para los conceptos y mantener la atención de los estudiantes.
La voz de los profesores debe ser suave pero audible en tono.
El uso de manos, expresiones faciales y lenguaje corporal para presentar los puntos / lecciones del maestro. Estas estrategias mantienen y mantienen el interés de los estudiantes. Esto es efectivo para contar historias.
El maestro modela la pronunciación y entonación correctas de vocabulario nuevo, estructuras gramaticales, oraciones y diálogos. Los alumnos siguen oralmente al profesor.
Esto es efectivo para las prácticas de conversación. Los estudiantes reciben roles y practican una estructura de objetivos a través de diálogos. Los estudiantes pueden desarrollar su confianza en sí mismos.